A la
altura del gran museo en que se convirtió tras su reforma, el MAN celebra la
arqueología con la magna exposición “El poder del pasado”, en la que hace un
repaso a siglo y medio de práctica arqueológica en España, una disciplina que
el gran público admira, pero que asocia a otras latitudes, a otras experiencias. Y no
debiera ser así; como la exposición demuestra, existe una gran riqueza material
legada por profesionales que se empeñaron (en todos los sentidos del término)
en devolver el lustre al gran pasado material que alberga la Península Ibérica.
Excepcionales piezas dan muestra de ello: el efebo de Antequera, la corona
votiva de Guarrazar, la gran dama oferente del cerro de los Santos, o la mítica
corona de camafeos de Sancho IV. Acompañada de un excelente discurso didáctico,
es una exposición que nadie debe perderse, especialmente las jóvenes
generaciones en las que se encuentran los grandes arqueólogos del futuro. Pero,
además, es una magnífica oportunidad para aprovechar y disfrutar de la
exposición permanente, que hace del MAN un hito por el que merece la pena
alargar el espacio de la “Milla de Oro” de Madrid.
sábado, 30 de diciembre de 2017
“León el Africano”. Amin Maalouf. Alianza Editorial
Haciendo uso de su habitual exquisitez
narrativa, Amin Maalouf dibuja en clave novelada la excepcional vida de Hasan
ibn Mohammed el Zayyati, “El Africano”, un personaje clave para entender el
cambio de era que supuso el siglo XV. Viajero, comerciante, embajador, pero
sobre todo, un auténtico personaje de mundo, extranjero en su propia tierra,
ciudadano (en el concepto actual del término) de un mundo dividido entre
cristianos y musulmanes, católicos y protestantes, imperiales y otomanos...
Allá donde moró, supo captar lo mejor de su vivencia, haciéndola suya,
incorporándola a su experiencia, sin dejarse llevar por tabúes o verdades
impuestas. Entre el mito y la realidad, la figura de León el Africano, si no
fue así, hubiera merecido serlo, como nos atestigua su eco en la historia.
Maalouf, autor de un puñado de novelas excepcionales dotadas de un elevado
lirismo, como en “Samarcanda” o en “La Roca de Tanios”, hace de su excepcional
prosa un envoltorio apropiado a un lenguaje común, de fondo, que inspira los
mismos principios que guiaron a Hasan: la bonhomía, el humanismo y la fraternidad
en un mundo cambiante al que se acerca, siempre, con los ojos abiertos, en estado
de novedad: “Soy hijo del camino, caravana es mi patria, y mi vida la más
inesperada travesía”.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)