lunes, 30 de diciembre de 2024

“Justiniano. Emperador, soldado, santo”. Peter Sarris. Taurus

 



Monumental biografía del último gran emperador romano que pudo ser considerado como tal. Legislador, conquistador, reformador, teólogo… Todos los atributos de su potestas los manejó y controló dando continuidad a la idea imperial de la antigua Roma. Desarrolló su programa de forma impetuosa, apabullante y poderosa, con un ejercicio no exento de dogmatismo y crueldad, luchando contra imperios, bárbaros, y facciones internas, y dejando un magnífico recuerdo entre sus sucesores. Además de compilar el derecho romano, sentando las bases del que habría de aplicarse tanto en occidente como en oriente, logró mantener la idea de que Roma no era sólo un lugar, sino un concepto; terció en las luchas religiosas creando el canon católico frente al arrianismo; creó el sistema de Themas para mejor defender el territorio; volvió a hacer del mediterráneo un lago romano, y construyó Santa Sofía. La peste, el expansionismo sin límite y las fuertes contradicciones internas, contribuyeron a que al final de su reinado, las costuras que mantenían unido al imperio anunciasen el inicio de una larga caída que, si duró un milenio, se debió gracias a sus reformas. Por las páginas de esta magnífica biografía circula, no solo la mirada vigilante y sagaz del emperador, sino la vida de sus grandes colaboradores y coetáneos: Teodoro, Belisario, Narsés, Procopio, … todos ellos tienen sitio en la historia, gracias a la aguda visión imperial de su señor.


No hay comentarios:

Publicar un comentario